La fuerza de la mística en el MST: resistencia colectiva contra la lógica neoliberal
El artículo "La mística como formador e inductor de lo común: la experiencia del MST", de Pedro Almeida da Silva y Odair Neitzel, analiza cómo la práctica de la mística en el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST) se relaciona con el concepto de común desarrollado por Pierre Dardot y Christian Laval. Los autores franceses sostienen que, ante el neoliberalismo, se vuelve imprescindible desarrollar, de forma colaborativa, alternativas fundamentadas en la cooperación, coorganización y autogestión. En este escenario, el MST surge como un ejemplo tangible de resistencia, en particular a través de la mística, vista como una práctica pedagógica, cultural y política.
La investigación, de carácter bibliográfico y analítico, muestra que la mística, originada en la Teología de la Liberación y resignificada en el movimiento, actúa como una fuerza movilizadora y formadora. Une a los militantes, fortalece la conciencia crítica y actualiza las memorias de lucha, proyectando nuevos sueños colectivos. Mediante el teatro, la música, los símbolos y los rituales, crea lazos de solidaridad y de pertenencia.
A pesar de desafíos como las jerarquías internas y las influencias neoliberales, la mística se mantiene como un elemento central de la pedagogía del MST, capaz de superar el individualismo y reforzar el compromiso con la reforma agraria y la educación popular. Para los autores, se trata de un ejemplo práctico de lo común, al transformar la indignación en acción colectiva y la esperanza en un proyecto político. El artículo demuestra que la mística es más que un ritual: es un motor de resistencia, de formación y de construcción de una sociedad más justa, democrática y solidaria.
